¿EL TELETRABAJO ES PARA TODOS?
Para muchos está siendo un dolor de cabeza trabajar desde casa, nada comparado con el abrazo de un amigo al llegar a trabajar, una broma, un comentario en voz baja o una mirada pícara, no todos estamos hechos para trabajar desde casa. Las video-llamadas difícilmente pueden ser una buena representación de la realidad
¿Qué factores determinan que a unos les guste el teletrabajo más que a otros?
- Desde luego un puesto diseñado para un trabajo autónomo hace una gran diferencia contra un tipo de trabajo que necesita de instrucciones y supervisión cercana.
- Algunas personas se sienten más cómodas siendo dirigidas (control externo) mientras que otras tienen una alta exigencia y autodeterminación (control interno).
- Las personas sociables necesitan una dosis diaria de conversaciones significativas y contacto afectivo, mientras que las personas introvertidas se sienten más cómodas con un contacto reducido.
- El gusto por los gadgets y la tecnología también marcan una diferencia al estar en teletrabajo.
- El trabajo a distancia permite a muchos aprovechar su energía de acuerdo a su ciclo biológico: matutino, vespertino o nocturno.
- Para algunos trabajar con tres tareas a la vez, tener llamadas en espera en el teléfono y dos personas esperando afuera de la oficina les produce adrenalina, para otros el estrés negativo crece conforme la demanda de contactos aumenta.
- Para los workaholics estar conectado las 24 horas y enviar mensajes es ideal, otros necesitan su vida personal de regreso al terminar la jornada.
- Las personas que necesitan un desgaste físico continuo tienen que tener lapsos para moverse y activarse sin estar conectados.
Las recientes modificaciones a la LFT seguramente tendrán una gran aceptación entre los colaboradores, aunque seguramente no tanto para los jefes hiperactivos.
Por Javier Novoa